Alabado sea Dios
En primer lugar, no es permisible trabajar en la fabricación
de medicinas que contengan alcohol o gelatina derivada del cerdo, porque el
alcohol cae bajo la denominación de embriagante (jamr), y no es permisible
su consumo ni como medicina ni mezclado con alimentos o bebidas. Más bien lo
que debe hacerse es eliminarlo. Cualquier derivado del cerdo es impuro y
debe evitarse y deben tomarse medidas para purificarse de él. Así que no es
permisible agregarlos a ningún tipo de medicamento, alimento o bebida.
Ibn al-Qayyím (que Allah tenga misericordia de él) dijo:
“Tratar
una enfermedad con cosas ilegales es aborrecible tanto desde un punto de
vista racional como desde el punto de vista islámico. En cuanto al punto de
vista islámico, esto se ve en el reporte y en otros textos que hemos citado
arriba. En cuanto a la razón, se ve en el hecho de que Dios, glorificado y
exaltado sea, sólo hizo prohibiciones debido a su mal, porque Él no le ha
prohibido a esta comunidad ninguna cosa buena o sana como forma de castigo,
tal como lo hizo en el caso de los hijos de Israel, cuando dijo (traducción
del significado):
“Debido
a la iniquidad los judíos les vedamos cosas buenas que antes les eran
permitidas, y por haber desviado a muchos del sendero de Allah”
(An-Nisá’, 4:160).
Más bien, Él ha prohibido a esta comunidad lo que ha prohibido a causa de su
natural maldad.
Su prohibición es una protección para los musulmanes, para
protegerlos de su consumo. Así que no es apropiado buscar curarse de la
enfermedad y enfermar por medio de esto, porque aun cuando pudiera ser
eficaz para superar la enfermedad, esta será seguida por una enfermedad que
es todavía peor, la enfermedad espiritual, a causa de la fuerza de su mala
naturaleza. Así que quien lo usa como medicina para quitar una enfermedad
física, está provocando la causa de una enfermedad espiritual. Por otra
parte, la prohibición dicta que uno debe evitarlo por todos los medios
posibles. Usarlo como un medicamento es hacerlo aceptable para la gente y
hacer que se traten con eso, y esto es lo contrario de lo que pretendía El
Legislador. Por otra parte, el alcohol es una enfermedad, como fue
establecido por El Legislador, entonces no es permisible tomarlo como
remedio. Además tendrá un impacto en el ser físico y espiritual del hombre y
causará que se contamine con el mal, porque su cuerpo claramente se verá
afectado por la mala naturaleza del remedio. Por lo tanto, si el remedio
tiene malas cualidades tendrá un mal impacto en su ser físico, entonces ¿qué
si el remedio es malo de por sí? Por lo tanto Dios, glorificado y exaltado
sea, prohibió a Sus siervos todos los alimentos, bebidas y ropa, que sea
perjudicial”.
Fin de la cita de Zaad al-Ma’ad
(4/141).
En Fatáwa al-Láynah ad-Dá’imah (22/106) dice: “¿Cuál es la
norma sobre sacar provecho del alcohol y los embriagantes en general? Es
decir, usarlos en pintura para muebles, medicinas, combustible, materiales
de limpieza, perfumes, o para hacer vinagre”.
Respuesta:
“Lo
que causa embriaga al beber en grandes cantidades es jamar. Si la cantidad
es pequeña o grande, es lo mismo, y es lo mismo si se llama alcohol o es
llamado por otro nombre. Lo que se debe hacer es derramarlo en la tierra, y
está prohibido conservarlo para utilizarlo en la limpieza, como combustible,
para hacer perfume, vinagre o para obtener cualquier otro beneficio.
En cuanto a lo que no embriaga en grandes cantidades, no cae
bajo la denominación de embriagante, y está permitido usarlo en perfumes y
medicinas, y utilizarlo para la limpieza de heridas, etc.
“Abdullah
Ibn Qa’úd,
‘Abdullah
Ibn Gadián,
‘Abd
ar-Razzáq
‘Afifi,
‘Abd
al-‘Aziz
Ibn
‘Abdillah
Ibn Baaz”. Fin de la cita.
En segundo lugar, si hay fabricantes que mezclan la medicina
con alcohol o gelatina prohibidos, ellos están pecando, como hemos
mencionado anteriormente. Entonces debemos mirar en la medicina: si la
cantidad agregada es pequeña, en el sentido en que aunque uno beba una gran
cantidad de la medicina no se embriagará, o si se absorbe completamente y no
tiene ningún impacto en el sabor, color u olor, entonces es permisible tomar
esta medicina y tratar la enfermedad con ella.
Dice en Fatáwa al-Láynah ad-Dá’imah (22/297):
“Algunos
medicamentos y dulces se venden en el mercado y contienen una pequeña
cantidad de alcohol. ¿Es permisible para nosotros consumirlos? Tenga en
cuenta que si una persona fuera a comer los dulces y saciarse de ellos,
nunca alcanzaría a embriagarse”.
Respuesta:
“Si
el alcohol en el dulce o la medicina está en una muy pequeña cantidad, de
tal forma que comer o beber mucho no llevaría a la embriaguez, entonces es
permisible consumirlo y venderlo, porque no tiene ningún efecto sobre el
sabor, color u olor, ya que ha sido absorbido en los componentes puros y
permitidos. Pero no es permisible para los musulmanes hacer algo como eso, o
añadirlo a la comida de los musulmanes o colaborar con quien lo hace”.
Fin de la cita.
En tercer lugar, es permisible vender medicina que contenga
alcohol o gelatina prohibida, si la cantidad que se agregó es pequeña y ha
sido completamente absorbida. Se han publicado declaraciones y dictámenes
legales sobre la permisibilidad del uso de medicamentos que contengan una
pequeña cantidad de alcohol, tanto por consejos de jurisprudencia islámica
como por publicaciones de opiniones legales de concilios y cuerpos del mundo
musulmán, mientras que se tenga en cuenta que es preferible evitar la
adición de alcohol a los medicamentos, con el fin de evitar cuestiones
dudosas.
Dice en una declaración del Consejo de Jurisprudencia
Islámico perteneciente a la Organización de la Conferencia Islámica, Núm. 23
(11/3) en respuesta a las preguntas del Instituto Internacional del
Pensamiento Islámico (IIIT) en Washington:
“Hay
muchos medicamentos que contienen cantidades variables de alcohol, entre
0.01% y 25%. La mayoría de estas medicinas son remedios para resfriados,
dolores de garganta, tos y otras afecciones comunes. Estos medicamentos que
contienen alcohol constituyen casi el 95% de los remedios para estas
enfermedades, lo que hace que sea muy difícil o incluso imposible obtener
medicinas que estén libres de alcohol. ¿Cuáles son las normas sobre tomar
estos medicamentos?”.
Respuesta:
“El
paciente musulmán puede tomar medicinas que contengan una pequeña cantidad
de alcohol si no hay disponibles medicamentos sin alcohol, si han sido
recetados por un médico confiable”.
Fin de la cita de Mayallat al-Machma’,
publicación No. 3, vol. 3, pág. 1087.
En una declaración emitida por el Consejo de Jurisprudencia
Islámico perteneciente a la Liga Musulmana Mundial, dice: “Es permisible
usar medicinas que contengan alcohol en pequeñas cantidades que sean
totalmente absorbidas, esto es dictado por la forma en que se hace la
medicina cuando no hay alternativas para ello, a condición de que sea
prescrita por un médico musulmán conocido”.
Fin de la cita de Qararát al-Machma’ al-Fiqhi al-Islami, por
Makka al-Mukárramah, pág. 341.
Para más información sobre medicinas y productos que
contengan gelatina prohibida o glicerina, por favor consulta la respuesta a
la pregunta No. 97541.
En cuarto lugar, si hay un medicamento o producto que podría
causar intoxicación si se bebe en grandes cantidades, o si contiene grasa de
cerdo, por ejemplo, que no ha sido transformada (istihálah), no es
permisible consumirla o venderla.
Quien trabaja en una farmacia debe evitar eso.
En conclusión, el principio básico es que es permisible
trabajar en farmacias, y que la mayoría de las medicinas están permitidas.
Si llega a establecerse con claridad que hay un medicamento
cuyo consumo está prohibido, entonces no es permisible venderlo, pero no hay
nada de malo en seguir trabajando allí, evitando vender lo que está
prohibido.
Y Allah sabe más.