En los tres artculos anteriores acerca de la religin del judasmo,
aprendimos en primer lugar que el judasmo y el Islam tienen mucho en comn. El
panorama poltico del siglo XXI parece pintar un cuadro de judos y musulmanes
que son enemigos mortales, pero ese no es el caso. Las dos religiones comparten
una historia, e incluso en algunas pocas han vivido, trabajado y cooperado
juntas. Muchos musulmanes se preguntan por qu los judos no ven al Islam
automticamente como una extensin de su propia fe y lo abrazan de todo
corazn. El hecho es que muchos lo hacen, pero la mayora no. En este ltimo
artculo continuaremos mirando las similitudes entre las dos religiones, y
exploraremos brevemente su interaccin histrica.
El judasmo y el Islam comparten una
herencia conjunta de tradiciones. Ambas religiones comparten muchos de los
mismos profetas y reconocen un padre comn en Abraham. Ambos reconocen en Dios
atributos similares, incluyendo los de Creador, Sustentador, Juez y Perdonador.
Ambas religiones creen que Dios es tanto Omnipotente como Omnisciente. El
parentesco de estas religiones contina en los valores morales, incluyendo el
respeto por la vida, el respeto por los padres, dar caridad, hacer el bien y
evitar el mal. Incluso sus creencias acerca de los momentos finales de la
existencia humana son similares. El judasmo y el Islam comparten la tradicin
de que, si la trompeta que seala el fin de los tiempos suena y llevas unas
semillas en las manos, debes sembrarlas. Existe una superposicin considerable
y continua entre las dos religiones a nivel fsico, teolgico y poltico.
La Tor registra Abraham como el
antepasado de los judos a travs de su hijo Isaac, nacido de Sara en
cumplimiento de una promesa hecha en el Gnesis. En la tradicin islmica, el Profeta
Muhammad es descendiente del primognito de Abraham, Ismael. La tradicin juda
tambin iguala a los descendientes de Ismael con los rabes. Los denominados
profetas judos ocupan un lugar destacado en la escritura y la literatura islmicas,
y el mensaje es siempre el mismo: adorar a un solo Dios.
“Abraham fue
el padre de los profetas. Tuvo dos hijos a quienes Dios eligi como profetas.
Ellos fueron Ismael, de entre cuyos descendientes Dios envi al profeta Muhammad e Isaac a
quien Dios bendijo con un hijo, Jacob, tambin conocido como Israel, por quien
fueron nombrados los Hijos de Israel y sus profetas”[1].
“Lo agraci [a Abraham] con Isaac y [a este
con] Jacob, a quienes conced la gua. A No tambin lo haba guiado en la
antigedad. Y de sus descendientes [tambin guie] a David, Salomn, Job, Jos,
Moiss y Aarn. As es como recompenso a los que hacen el bien. Y a Zacaras,
Juan, Jess y Elas; todos ellos se contaron entre los piadosos. Y a Ismael,
Eliseo, Jons y Lot; a todos ellos los distingu entre la gente”. (Corn
6:84-86)
Histricamente, judos y musulmanes han
compartido sus culturas y prosperado juntos, a veces durante siglos. Esta
conexin se ve bien reflejada en los 700 aos de gobierno musulmn en Espaa,
conocida en la poca como Andaluca. Fue all donde los judos llevaron a cabo
sus posiciones polticas ms importantes, fueron mdicos de los gobernantes
musulmanes, y generaron complejas teoras filosficas. Maimnides vivi y
escribi la Gua de los perplejos (una discusin sobre algunas de las
teoras ms difciles de la teologa) en Crdoba. All permanece una estatua en
su honor. Los judos pudieron hacer grandes avances en matemticas, astronoma,
filosofa y qumica, y esa poca a veces se denomina la Era Dorada de la
cultura juda. En 1492, cuando Andaluca fue invadida por los catlicos y los
gobernantes musulmanes fueron depuestos, los judos y los musulmanes huyeron
juntos a la seguridad de las tierras musulmanas del Norte de frica, y al
oriente hacia Egipto, Palestina, Siria e Irak.
“Dios no les prohbe hacer el bien y tratar
con justicia a quienes no los han combatido por causa de la religin ni los han
expulsado de sus hogares, porque Dios ama a los que actan con justicia. Dios
solo les prohbe que tomen por aliados a quienes los combaten a causa de la
religin y los han expulsado de sus hogares o han contribuido a su expulsin”.
(Corn 60: 8-9)
El trato dado por los musulmanes tanto
a judos como a cristianos est bien documentado. El califa Omar, bajo cuyo
gobierno fue conquistada Jerusaln unos seis aos despus de la muerte del Profeta,
no solo promulg un decreto protegiendo los lugares sagrados de los cristianos,
sino que invit tambin a 70 familias judas de Tiberades para que
establecieran su residencia en Jerusaln, de donde haban sido expulsadas por
los romanos. Los judos y los musulmanes tienen mucho en comn, siendo su mayor
doctrina la creencia en Un nico Dios, indivisible y accesible.
Con tantas similitudes, fcilmente nos
podemos preguntar: por qu no hay ms judos que se conviertan al Islam? Como
ya se mencion antes, muchos lo hacen. En los primeros das del Islam, de
hecho, muchos judos se convirtieron al Islam, y uno en particular, Abdul-lah
Ibn Salam, fue un compaero cercano del Profeta Muhammad. Su historia puede ser
leda en detalle en este mismo sitio web[2].
La siguiente es una breve lista de judos notables que se convirtieron al Islam.
Rashid-ad-Din Hamadani Mdico
persa del siglo XIII.
Yaqub ibn Killis Visir
egipcio del siglo X.
Leila Mourad Cantante y
actriz egipcia de las dcadas de 1940 y 1950.
Lev Nussimbaum Escritor,
periodista y orientalista del siglo XX.
Jacob Querido Sucesor del
autoproclamado Mesas judo Sabbatai Zevi, del siglo XVII.
Ibn Sahl de Sevilla poeta
andaluz del siglo XIII.
En realidad, sabemos muy poco sobre
cuntos judos se convierten al Islam en la actualidad. Sin embargo, sus
nmeros pueden ser mayores de los que imaginamos, considerando que el Islam est
creciendo, segn Pew,[3]
un 2,9% al ao. Esto es ms rpido que el crecimiento de la poblacin mundial
total, que aumenta un 2,3% anual. En este mismo sitio web estn disponibles datos
estadsticos confiables recopilados de all[4].
Los datos del Estado de Israel sugieren
que la tasa de conversin de los judos al Islam en Israel se ha duplicado en
los ltimos aos. “Los judos dicen que deciden convertirse despus de
profundizar su conocimiento sobre el Islam. Muchos estn desilusionados con el judasmo”,
dijo un alto miembro del tribunal islmico. Los judos se estn convirtiendo a
pesar de que el Ministerio Israel del Interior y de Asuntos Religiosos se los
dificulta. Segn un converso: “Me tenan como pelota, envindome de un lado a
otro, e hicieron que me viera un psiquiatra para asegurarse de que no me
haban lavado el cerebro. Hicieron todo lo posible para que yo desistiera de
mi conversin y volviera al judasmo”[5].
Cuando nos fijamos en todas las
similitudes, parece ser que es solo un pequeo paso, nunca un gran salto
cognitivo, el que un judo se deslice hacia la religin del Islam. Sin embargo,
el Islam es un regalo de Dios, y Dios lo da a quien l quiere.
Pie de pgina:
[1]
Tomado de Usul ud din al islam, del Shaij Muhammad
ibn Ibraheem At-Tuwayjri (con algunas modificaciones gramaticales).
[2]
www.islamreligion.com/es/articles/4703/viewall/abdullah-ibn-salam-parte-1-de-2
[3]
El Pew Research Centre es un centro de estudios
estadounidense con base en Washington, D. C., que proporciona informacin sobre
los problemas, actitudes y tendencias que definen a los Estados Unidos y al
mundo.
[4]
www.islamreligion.com/es/articles/4394/viewall/la-poblacion-de-musulmanes-parte-1-de-2
[5]
www.ynetnews.com/articles/0,7340,L-3274735,00.html