Aleyas 1 a 8 La misin del Corn y los
atributos de Aquel que lo envi
Dios le informa al Profeta Muhammad (la
paz y las bendiciones de Al-lah sean con l) que l no hizo descender el Corn
para causarle angustia, sino como un recordatorio para quienes tienen temor de
Dios, una revelacin de Aquel que cre la Tierra y los cielos, el Seor de la
misericordia, Quien est por sobre el Trono. Todo en los cielos y en la Tierra,
y lo que hay entre ellos, Le pertenece solo a l. Y l sabe lo que la gente
oculta.
Aleyas 9 a 99: Historia del Profeta Moiss
Lo que sigue a continuacin es la
historia ms vvidamente descrita de Moiss. l es el Profeta de quien Dios ms
habla en el Corn, y l ha narrado los eventos de su vida desde diferentes
ngulos, de modo que su personalidad se presenta cada vez en una perspectiva
distinta. Se hace referencia al viaje de Moiss y su familia desde Madin hasta
Egipto. Cuando fue hacia la luz, escuchando la voz de Dios que lo llamaba.
Moiss sostuvo una conversacin con su Seor en el Valle Sagrado. Dios le dijo
que estableciera la oracin en recuerdo Suyo, y luego le otorg dos milagros.
Uno, que su cayado se convertira en una serpiente cuando lo arrojara al suelo;
y el otro, que cuando presionara su mano derecha contra su costado izquierdo,
esta saldra blanca y brillante. Despus de esto, Dios le dijo que haba sido
elegido para una misin: invitar al Faran al camino de Dios. Moiss le suplic
a Dios que le diera Su apoyo y que le permitiera a su hermano, Aaron, ayudarlo.
Dios acept sus splicas y le concedi su deseo, y le record las bendiciones
que le haban sido concedidas desde su nacimiento, cuando el Faran de aquella
poca mat a los hijos varones de los israelitas. Dios tambin le record a
Moiss cmo l lo hizo pasar por diversos giros de la vida antes de llegar a
ese momento maravilloso en el que lo haba elegido como Profeta.
Cuando el Faran vio las seales de
Dios, se sinti amenazado y reuni a sus hechiceros para un duelo. Los brujos
del Faran retaron a Moiss, y finalmente reconocieron la verdad de su Seor.
Luego, Dios le orden a Moiss llevar a la gente de Bani Israil fuera
de la esclavitud del Faran. Pero, cuando Moiss fue al monte At-Tur para
recibir la Tor, su pueblo comenz a adorar la estatua de un becerro, siendo
desviado por Samiri. Moiss lo desterr y quem el dolo. El propsito de todas
estas historias del pasado es que podamos aprender de ellas.
Aleyas 100 a 114: El castigo de aquellos que
se alejan del Corn y algunos espectculos del Da de la Resurreccin
Quien se aleje del Corn soportar una
carga pesada y terrible en el Da de la Resurreccin. Cuando la trompeta suene
y Dios rena a los pecadores, ellos se murmurarn unos a otros que solo
estuvieron diez das en la Tierra, pero los ms perceptivos de ellos dirn que
permanecieron en la Tierra solo un da.
En ese da, Dios derribar las montaas
hasta hacerlas polvo y dejar una llanura plana, y la gente seguir el llamado
de Aquel de Quien no hay escape. Toda voz ser silenciada por el Seor de la
misericordia, solo se escucharn murmullos. En el Da del Juicio, la
intercesin ser intil, excepto la de aquellos a quien el Seor les d permiso
y cuyas palabras l apruebe. Todos los rostros se humillarn ante el Siempre
Vivo, el Siempre Vigilante. Aquellos agobiados por sus malas acciones se
desesperarn, pero quienes hayan hecho actos justos y hayan credo, no tendrn
miedo de injusticia ni de privacin.
Aleyas 115 a 127: La historia de los ngeles
prosternndose ante Adn y advirtindole sobre Satans
Dios les orden a los ngeles que se
prosternaran ante Adn y ellos lo hicieron, pero Satans se neg, as que Dios
le dijo a Adn que Satans era su enemigo y de su esposa, y que l procurara
hacerlos expulsar del Paraso, y que mientras permanezcan all, no tendrn
hambre, no sentirn desnudez, no padecern sed ni sufrirn calor.
Pero Satans le susurr a Adn, lo tent
llevndolo al “rbol de la inmortalidad y el reino eterno”. Adn desobedeci a
su Seor, y tanto l como Eva sucumbieron ante sus susurros, y comieron del
rbol. Se hicieron conscientes de su desnudez y comenzaron a cubrirse con
hojas.
Ms tarde, su Seor los acerc, acept
su arrepentimiento y los guio. Dios los expuls del Paraso, y les dijo que
quien siga Su gua no se desviar ni caer en miseria, pero quien se aleje de
ella, tendr una vida de mucha dificultad. Dios promete que quien se aleje de la
gua ser levantado ciego en el Da de la Resurreccin, entonces le preguntar
a Dios por qu ha sido resucitado ciego si en vida tena vista. Dios le
responder que, as como ignor las revelaciones de Dios cuando le llegaron, es
justo que sea ignorado en ese Da. As es como Dios retribuye a quienes se
exceden y no creen en Sus revelaciones. Dios dice que el castigo ms grande y
duradero ser en el Ms All.
Aleyas 128 a 129: Aprender lecciones de
naciones anteriores
No aprenden una leccin de las muchas
generaciones que Dios destruy antes de ellos, a travs de cuyas moradas pueden
ahora caminar? Hay seales verdaderas en esto para cualquiera que tenga
entendimiento. Si no fuera por una Palabra predeterminada de su Seor, ellos ya
habran sido destruidos. Su tiempo ha sido fijado.
Aleyas 130 a 132: Instrucciones para el
Profeta
Se le dice al Profeta Muhammad que sea
paciente con lo que ellos dicen, y que celebre la alabanza del Seor antes del
amanecer y del ocaso, durante la noche, y al comienzo y al final del da, para
que pueda hallar sosiego y felicidad. Dios le instruye no mirar con deseo lo
que Dios les ha concedido a algunos de ellos para que disfruten en esta vida
mundana. Dios los pone a prueba con ello, pero la provisin del Seor en la
vida por venir es mejor y ms duradera.
Se le dice al Profeta Muhammad que
ordene a la gente rezar y ser firme en sus oraciones. Dios no le pide a nadie
que Le d provisin, l provee a todo y a todos, y las recompensas del Ms All
pertenecen a los devotos.
Aleyas 133 a 135: La terquedad de los
politestas y sus consecuencias
Los incrdulos preguntan por qu el Profeta
Muhammad no trae una seal de su Seor. Dios les dice que les fue dada una
seal clara en las escrituras anteriores con respecto a la llegada del Profeta
Muhammad. Si Dios los hubiera destruido con un castigo antes de que llegara su Mensajero,
se hubieran quejado y hubieran dicho que, si Dios les hubiera enviado un Mensajero,
habran seguido Sus revelaciones antes de sufrir la humillacin y la desgracia.
Se le dice al Profeta Muhammad que les diga que todos estamos esperando, as
que mantengan la espera, en ltima instancia, ellos aprendern quin ha seguido
el camino recto, quin ha sido guiado correctamente.