Alabado sea Dios
En primer lugar, si la persona responsable no está segura de su intención a
la hora de reponer un ayuno, sobre si ha tenido la intención de hacerlo así
antes que la aurora llegue, entonces el principio básico es que no ha tenido
la intención, porque esto es lo más seguro y probable. Si no está segura de
si tuviste la intención de hacer esa reposición de ayuno, entonces debemos
considerar que esa intención no estaba presente, y lo que es seguro no puede
ser cambiado por la mera duda.
Pero si fuiste afectada por los susurros de Satanás, entonces debes
continuar ayunando sobre la base de que tu intención era reponer ese ayuno,
porque las dudas no cuentan si son vagas y diversas y no son concretas. Es
esencial ponerle un límite a las dudas, y no permitirse ser desviado de lo
que estamos haciendo a causa de ellas, evitando dificultarnos las cosas
innecesariamente, porque eso es contrario a las enseñanzas del Islam.
Lo mismo puede ser el caso si la duda es algo que ha cruzado súbitamente
nuestra mente, cuando piensas que muy probablemente tu intención era
correcta, o si hay evidencia que corrobora e indica que estabas ayunando
para reponer un ayuno perdido, como por ejemplo si usualmente no ayunas en
ese día o incluso en esa situación excepto cuando estás recuperando un ayuno
perdido.
Por eso los eruditos han dicho que la duda después de hacer una acción no
cuenta para nada, y lo mismo se aplica si las dudas ocurren frecuentemente.
En segundo lugar, si alguien comienza a observar un ayuno obligatorio, como
por ejemplo reponer un ayuno perdido de Ramadán, no es permisible romper ese
ayuno sin una razón válida, razón que podría ser un viaje o enfermedad. Si
rompes ese ayuno con o sin una razón válida, debes reponerlo nuevamente,
ayunando otro día en lugar de ese.
No es necesario que ofrezcas ninguna expiación por haber roto ese ayuno, ya
sea que la razón fuera válida o no, porque la expiación sólo es requerida
por romper el ayuno manteniendo relaciones durante el día en Ramadán. Para
más información, por favor consulta la respuesta a la pregunta No.
49750.
Si el musulmán cambia su intención de reponer un ayuno perdido a observar un
ayuno voluntario, no debe ofrecer una expiación por ello, pero debe pedir
perdón a Dios y arrepentirse.
En conclusión, si tenías la intención desde la noche anterior de reponer un
ayuno perdido, entonces no era permisible que rompas ese ayuno a causa de
las dudas. Pero si eso ya ha sucedido, entonces debes pedir perdón a Dios y
arrepentirte, pero no hay ninguna expiación específica que debas realizar en
ese caso.
Si no estás segura de si tenías la intención de reponer ese ayuno perdido
desde la noche anterior, entonces el principio básico es que no la tenías.
Actuamos sobre la base de lo que es seguro, que es que tuviste la idea de
reponer ese ayuno después de la aurora. Entonces, tu ayuno es válido como
ayuno voluntario. Esto se aplica si la duda sobre si habías tenido la
intención o no antes de la aurora era razonable.
Ahora, si tu problema es que te sentiste injustificadamente acechada por las
dudas, y eso te sucede así frecuentemente con otros asuntos, entonces esas
dudas no son razonables ni justificadas, y la reposición de un ayuno
obligatorio no puede verse afectada por esas dudas. Por lo tanto, si ese era
el caso no era permisible cambiar tu intención y abandonar la reposición del
día de ayuno perdido.
Puesto que ya sucedió y abandonaste esa reposición, debes todavía reponer
ese ayuno perdido, pero no hace falta que ofrezcas ninguna expiación.
Y Allah sabe más.