Alabado sea Dios
Ayunar en los primeros 8 días del mes de Dul-Híyyah es recomendable tanto
para los peregrinos como para otros musulmanes, porque el Profeta Muhámmad
(que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) dijo: “No hay días en
los cuales las buenas obras sean más amadas para Dios que en estos diez
días”. Le preguntaron: “Oh, Mensajero de Dios, ¿ni siquiera la lucha por la
causa de Dios?”. El Mensajero de Dios (que la paz y las bendiciones de Allah
sean con él) respondió: “Ni siquiera la lucha por la causa de Dios, excepto
un hombre que sale a ella con su entusiasmo y su riqueza, y vuelve sin
ninguna de las dos”. Registrado por Al-Bujari (969) y At-Tirmidi (757), del
reporte de Ibn ‘Abbás (que Dios esté complacido con él).
Dice
en Al-Mawsu’ah al-Fiqhíyah (28/91): “Los juristas están unánimemente de
acuerdo en que es recomendable ayunar durante los primeros 8 días del mes de
Dul Híyyah, antes del día de ‘Arafah. Los málikis y los sháfi’is afirmaron
que es parte de la Tradición Profética ayunar en estos días para los
peregrinos también”. Fin de la cita.
Dice
en Nihaiat al-Muhtách (3/207): “Es parte de la Tradición Profética ayunar
los 8 días antes del día de ‘Arafah, como se afirmó en Ar-Ráwdah, y esto se
aplica igualmente a los peregrinos y a otros, pero no es parte de la
Tradición Profética que el peregrino ayune en el Día de ‘Arafah, sino que
más bien es recomendable que no ayune entonces, aún si es capaz de hacerlo,
siguiendo el ejemplo del Mensajero de Dios (que la paz y las bendiciones de
Allah sean con él), y que de tal manera tenga más fuerza para hacer las
súplicas”. Fin de la cita.
Y
Allah sabe más.